Mi cuerpo arquitecto

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Mi cuerpo de arquitecto.

"El rol que tomamos es solo una utopía que nunca se alcanza".

-Algún día sabré contar esta historia-

Hace tres años fui a la pequeña Capilla del

Hermano Klaus a las afueras de Colonia. Ahí unos tres o cuatro años antes me había prometido perdonar los sinsabores de mi joven y temprana adultez.

Esta vez acompañado decidí que el lugar era igualmente impresionante, pero yo estaba falto de algo: mi voz

Crear una vida tras casi perderla, solidificar la locura líquida de esa etapa en recuerdos solamente.

Volver siempre es saber que no se vivirá con la intensidad de la primera vez, volver también es percatarse de las pequeñas fallas que tiene la romantización que juega la memoria.

Yo volví, cimenté mi vida en recuerdos inflados y llenos de atajos para estar hoy más presente

Si fuera una tercera vez, vencido de mis segundas impresiones creo que darían gracias por tener treinta y saber que nunca entenderé la grandiosidad con la cual Herr Zumthor crea un espacio, pero queda en mí seguir creando (solo o acompañado) hasta hacer del mundo un mejor lugar para mí.

Habitable para todos, enraizado en un presente que corre y se escapa a cada rato.

Oaxaca de Juárez, 2025.